Deshazte de él.
Llevo intentándolo mucho tiempo. Creo que no puedo.
Sí que puedes.
No. Sólo puedo ignorarlo, pero siempre está ahí.
Algún día se sentirá tan despechado, tan ignorado... que se irá para siempre.
¿Y podré vivir sin él? ¿y si me hace falta?
Un lastre así no puede ser útil, sólo es un freno.
Los frenos hacen mucha falta.
Ya está ahí de nuevo.
Lo sé, no puedo evitarlo..
Yo también tengo mi dosis. A ver si de una vez lo tiramos al contenedor del vidrio. Para que se destruya mejor.
ResponderEliminarUn bico!
Siempre se puede. UN saludo
ResponderEliminarvivir sin miedo es desconocer la sensación de estar a salvo. son de esos antónimos conceptuales necesariamente complementarios. la verdad es que sentirse a salvo es una sensación por la que merece la pena pasar miedo, de vez en cuando (pero poquito, eh?)
ResponderEliminarVivir sin miedo seria como vivir sin dolor... ¿te imaginas no darte cuenta de que te estas pinchando con un clavo o de que te estas escaldando con agua hirviendo?...
ResponderEliminarEl dolor y el miedo son necesarios, pero evidentemente, en dosis justas y reguladas.
Bicos.
ui...sem medo ao precipicio já estavamos todos a tirar-nos por ele...
ResponderEliminarEl miedo puede ser una terapia para sobrevivir, pero en su justa medida.
ResponderEliminarVivir aterrado o enclaustrado por el miedo, puede ser la peor pesadilla.
Bicos.