sábado, 12 de abril de 2014

Las cosas que me pasan... La magia

A veces pasa mucho tiempo y daría la impresión de que nunca pasa nada, de que todo es una sucesión de rutinas sin descanso, nada que nos emocione, nada que nos llegue.
A veces una quiere ir a buscar pastillas para no soñar, porque lo que sueña se le antoja una pesadilla, y, a saber, lo que es un mal sueño para unos puede ser un gran sueño para otros. Al final todo es un amasijo de verdades inventadas, y lo que nos pasa, o no nos pasa, sólo está dentro de nuestra mente.
Así que de vez en cuando, le perdemos miedo a la irrealidad, y nos perdemos en nuestras verdades, que son mentira...... y vivimos y nos emocionamos con ellas. Y por qué no?
Mentira?
Por qué mentira?
Todo es cuestión de fé en esta vida. Al final todo, TODO, son visiones y fe. Tus ojos son un instrumento que tu mente usa hábilmente, muy limitados técnicamente, por lo vasto de la realidad, no porque Dios (¿ein?) no los haya hecho perfectos................. No me toméis por una sacrílega cualquiera capaz de menospreciar la grandiosidad del universo, de la naturaleza y por ende, de nosotros mismos :P
Están limitados a una "zona visible" de la que sólo cogemos unos trazos mínimos que tengan sentido para nosotros.
- Mira! He grabado un hada!
- No, no creo
- Sí, mira... la vas a ver ahora - le digo mientras le muestro la minipantalla de mi cámara al reisiño. Curiosamente, tiene una reacción distinta a la que esperaba, pero lógica en unas décimas de segundo que razoné... Si a mi mi madre me llega a aparecer de pequeña con una cámara toda emocionada diciendo que había grabado un hada, o un ángel, o una bruja, o cualquier otro personaje "de cuento" me hubiese puesto algo más que nerviosa. Sin embargo la niña se mostraba tranquila, tampoco muy curiosa... como si ya estuviese de vuelta de las extrañas movidas de su mamá.... O quizá, pienso, la niña, más pequeña, todavía no le cerró la puerta a todas esas verdades que nos va desmintiendo la vida cuando crecemos... para poder malvivir en el "real mundo"
El reisiño no estaba seguro de querer ver.... pero lo convenzo para que mire...
- Eso no es, es un efecto tuyo...
- No, de eso nada, tu sigue mirando, yo no hice nada.
El niño sigue mirando un poco nervioso.
- Uau, vamos a ganar mucho dinero con esto mami, puedes ir a cogerla??
- Dinero??, no, no se puede coger cariño... Es un hada mágica, que sólo se pudo ver por la cámara... Es muy posible que no pueda verla más...
- Es magia! - dice la niña al fin - yo también quiero verla! - 
Se la enseño a ella también.
- Es una mariposa de luz! - dice la pequeña
- Me da mieedooo.. - se lamenta el niño
- No, no es para tener miedo - digo bajando el tono para disimular mi emoción y quitarle trascendencia al asunto - es magia de la buena - sonrío.
Siento lo de los anuncios en el vídeo, pero escuchaba a ACDC de fondo... Desconozco si eso fue lo que hizo salir al hada a bailar.... con la luz del sol poniente... Probablemente.

domingo, 6 de abril de 2014

Apagón

Meto tres pilas de las baratas, no recargables, en mi cámara, e inmediatamente surge la imagen en la pantalla, una ilustración que sirve de portada al libro de Língua de mi hijo que descansa en mi regazo a la espera de un escaneado. Qué bonita es...  No me había percatado antes, sólo cuando pasó por el ojo de la cámara reparé en su belleza....
Aissss... qué mal qué mal...
Menos pantallas y ordenador, más trabajar... Con las manos, con el cuerpo, en la vida real.
Pero también es real lo que pasa por ahí, y llega hasta aquí, a través de las pantallas. Lo vemos. A veces las cosas se transforman, las historias se inventan, pero si hay una imagen, aunque sea trucada...
Primero el agujero negro que iban a crear en los aceleradores de partículas, después los mayas... y ahora, ahora nos queda el apagón. Un 20% de posibilidades de que no ocurra, según el experto.
La red se nos ha hecho indispensable. Fuera del hecho de que estamos todos enganchados, que algunos ya parece que no sabemos relacionarnos fuera de un chat o de una red social. Internet es algo más que una herramienta que facilita el trabajo: es una herramienta indispensable para todos y para todo.

Si hubiese un apagón, uno mundial, duradero... ¿Cuánto tiempo pasaría sin que la gente estuviera en las calles? Primero preocupada, y pronto, pronto, agresiva... Cundiría el pánico, muy posiblemente.
Entonces una se preocupa... otra vez...

Primero no habría acceso a internet, luego fallaría la luz, el teléfono... ¿el agua? Los sistemas de las tiendas, de establecimientos varios... Desabastecidos de todo... Los bancos, por supuesto... Los hospitales y centros de salud... Las historias clínicas informatizadas... ja ja ja... todo "a salvo", en los discos duros de los servidores....
Y así estamos, a expensas de una energía que gastamos como si fuera inagotable... y que sabemos, seguro, que no lo es...
El cambio de paradigma sería obligatorio... y traumático.

Pienso que soy una adicta, pero eso es lo de menos.

La humanidad está enganchada en la red, y no podemos escapar...