Soy una de esas hojas, la más bonita. Ahí estoy, aferrada a mi ramita, sin rendirme, ansiosa por volver a ponerme verde, intensa, tierna, por volver a sentir la savia fluir por mis entrañas.Mi historia no es distinta de las otras: el otrora templado viento que me mecía se enfrió, se puso más agresivo, como enfadado, y me sacudió. No dejé que me arrancase, pero todo cambió y se hizo más difícil. Mi ansia de vida me mantiene firme, y aun cansada, no dejo de preguntarme por qué... por qué los elementos se vuelven en Mi contra...
"Como si fuese la única...", dicen casi con desprecio. Y lo soy. Lo soy. Para mí sí. Sí que lo soy.
Dicen que es la naturaleza. Ley de vida. "Pero yo.. no soy natural" les respondo soberbia.
Mi Árbol también lucha por mí, quizá intente ser como yo, antinatura... Todavía le quedan fuerzas para agarrarme, a pesar del letargo que el frío le produce y aun sabiendo que tarde o temprano me caeré. Siempre guarda una esperanza para su hoja preferida, y esa soy yo. Soñadores.... Empiezo a sospechar que lo hace con una todas las temporadas, para darle sentido a su vida. Pero me da igual, sé que este tiempo ha sido sincero... que, a su manera, me quiere. También sé que seguiré mudando mi color hasta el marrón tabaco, destacando contra ese azul intenso de un despejado cielo que presagia una brutal helada, quizá mi última estocada. ¿Dónde está el Sol salvador? ¿Por qué ya no nos mira igual? ¿Por qué pasa tan rápido, sin calentar? Se ha vuelto indiferente, y sólo se pasa unas pocas horas, mirada sesgada, para iluminar con su natural luz toda nuestra decadencia...
Estoy tan cansada...
Y tengo tanto sueño...
Aquí una nana para mí... O no: Debe ser mi réquiem.
Pois sí señora, ainda que semelle unha contradicción, é "lei de vida". Así é o ciclo vital precisamente. Pero ti non te preocupes, folliña, volverás rexurdir na tua propia póla, e volverás a ser verde (outros serán sempre verderolos); e volverás sentir a savia configurando a tua estructura e volverá o sol quentar os teus folículos tenros...
ResponderEliminar(Joer, parezo Bécquer co de tanto volverán, volverán)
Biquiños invernais
De mayor quiero ser hoja favorita. Seguramente lo fui algún día, de ahí las revelaciones y los partos.
ResponderEliminarSi viene el sueño, más a mi favor para enunciar que todo está conectado.
Un (b)eso con nana desconocida
Mira, a lo mejor me equivoco y no tiene nada que ver mi percepción con lo que tú has querido transmitir aqui, pero también es agradable ver las diferentes percepciones que en los demás producen nuestras letras asi que ahí va:
ResponderEliminarMe ha parecido una narración maravillosa y sobre todo muy sutil, porque me ha parecido ver disfrazada la "violenvia de género o violencia machista como ahora la llaman". Esas mujeres (el día anterior a esta publicación fue un día de especial recuerdo para ellas) no dejan de ser hojas que se aferran a la vida, que sin saber por qué ni entender de motivos, un viento las ha sarandeado de esa manera y que aunque el árbol (la vida) sigue con ellas ya están cansadas, ya tienen sueño......y no saben si escuchan una nana o su propio requiem.
Bueno, termino diciéndote que sea como fuere, tienes magia a la hora de escribir y llegar al lector. Enhorabuena.
Bicossss!!!!!!!
Pues para esas hojas que caen en estos meses, el otoño no es una buena noticia, pero no hay nada como pisar un manto de esas hojas marrones......Me encanta el otoño!
ResponderEliminarcair da árvore abre novos rumos...
ResponderEliminarbeijos
Sí, claro, renovarse o morir... jes.
ResponderEliminarEn fin, nada se crea ni se destruye, sólo se transforma, pero ese enunciado suena vacío... ¿no es cierto? ¿De qué vale no dejar de ser si en la transformación pierdes tu identidad, si ya no eres tú, sino otra cosa?
Eso sí, mucho después de pisar el manto de hojas secas y húmedas, qué bonito estrenar temporada nueva del todo, primaveras y veranos, hojas y flores que brotan ajenas al final que les espera... Y es que todo lo que empieza... Y la vida sigue y se alimenta del humus del suelo. Al fin son caníbales ¿no es cierto?
Sí sí, se me va la olla... jajaja
Neli, cierto que cuando escribí la frase del viento que se enfría y enfada y sacude no pude menos que recordar la violencia de género y machista... Es lo que tiene escribir así, por impulsos... No sé muy bien lo que quise expresar, sólo conté lo que la imagen me contó a mí primero, luego vienen las interpretaciones...
Supongo que mi talento no es tal, es más casualidad, o el mismo arte que por sí mismo, de forma natural se canaliza a través de mi textos e imágenes... jejeje (¿suena eso pretencioso? Sí, quizá sí... bueno, es igual..)
Sólo me dejo llevar.
Bicos y gracias.