jueves, 28 de febrero de 2008

¡El teléfono corre!

Tinoninoní.. tinoninoní... tinoninoní..
- Centro de Salud, buenas tardes..
Silencio. Lo intento de nuevo, más alto:
- Centro de Salud, buenas tardes
Una respiración se oye al otro lado, como decidiendo como comenzar la conversación, intento arrancar las palabras:
- Buenas tardes - le chillo vocalizando lo mejor que sé (y sé muy bien) al micrófono del maltrecho aparato de cascos con que nos han dotado para nuestra ardua labor...
- ¿Es el ambulatorio?- oigo al fin
- Sí, Centro de Salud, buenas tardes
- Buenas tardes - se decide - quería pedir turno
- ¿Es para el médico?- le pregunto
- Sí, para el médico -
- Dígame el nombre -
- El Dr. Rodríguez -
- El nombre del paciente - le insisto
- Para el Dr. Rodríguez - me insiste él
- Dígame como se llama usted - vuelvo a insistir
- ¿Yo?- pregunta intrigado
- ¿Es usted quien va a venir al médico? - interrogo
- Sí sí
- Pues dígame como se llama
- ¿Pero hay cita para mañana?- intenta el hombre hacerse con el rumbo de esta amena conversación, casi me tiene contra las cuerdas...
- Dígame su nombre y así tendré acceso a la agenda del doctor y le digo si tiene para mañana - le hablo en el mejor de mis tonos de paciencia mientras me pregunto si llegaré a tiempo de contestar esas otras dos llamadas que están entrando
- Soy Manolo, el de Guillade - doy por perdidas las llamadas...
- Bien, dígame sus apellidos por favor - vuelvo a insistir
- Rodríguez López - ¡premio para mí!, pienso, sólo debe haber unas 10 páginas de pacientes que se llamen así, tendré que acotar la búsqueda.. veamos, sólo en este centro de salud, dos páginas, vale... vuelvo a la carga, ¡Dios nos coja confesados!:
- Dígame su fecha de nacimiento por favor -
- ¿Cómo?
- Que cuándo nació - pregunto levantando la voz lo que me premite la buena educación, sin evitar que varios de los presentes en la salita me miren, además de los compañeros que pululan a mi alrededor que esbozan una cómplice sonrisa..
- Nací en Octubre -
- Qué año -
- En el 30 -
- Aquí está - le digo
- ¿Sí?-
- Sí, tiene para mañana a las nueve y media, ¿le va bien?- le pregunto dando el trabajo como casi hecho (ilusa)
- Bueno, sí -
- Bien - le doy a aceptar y ya está, pantalla de búsqueda de paciente
- Mire, ¿no tiene para más tarde?- me dice cuando ya iba a despedirle
- Pues creo que sí - digo con resignación. Tardo unos segundos en localizar al paciente de nuevo
- ¿Oiga?- me pregunta impaciente
- Sí, sí, estoy buscándole otra vez, un segundiño..
- Pero si estoy aquí - me dice
- Un momento por favor- le insisto sonriendo a su ingenuidad
- Oiga, ¡que el teléfono corre!- me espeta desdibujando mi sonrisa de golpe
- ¿Le va bien a las 10?
- ¿No tiene a las diez menos cuarto?- dame paciencia Dios mío, pienso mientras un tic hace aparición en mi ojo izquierdo
- Es que luego el doctor se retrasa y no salgo ni a las doce - se explica
- Sí, de acuerdo, le pongo a las diez menos cuarto - le digo
- Espere que anoto - me dice él - entonces a las 9:45, ¿no?-
- Sí - le doy a aceptar y listo, a por otra llamada, o atiendo al señor del mostrador que me mira impaciente, sí..
- Casi mejor deme la de las 9:30 señorita - me dice la que empieza a parecerme odiosa voz del teléfono. Mi tic se acentúa.
- Y deme también para la enfermera, que el médico no me quiere tomar la tensión -
[...]

9 comentarios:

  1. jajaja!! pobretaaa!! te he visualizado como la mismísima encarna de noche con las empanadillas :P

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  2. Santa paciencia...
    Y aguantas, sin perder la compustura??
    Yo no podría, haría tiempo que le hubiera dicho que solo había para las 9:30,ya verías como le iba bien...

    Besos

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  3. estoy con ana....
    yo le hubiese soltado que tan solo habia para una hora y punto... hay gente a la que no se le puede dar mucha cancha, que se pierden por ella.
    Bicos.

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  4. ¡Meu deus, a paciencia que fai falla!!
    Mira que somos pesadiños, algúns máis ca outros, pero a todos nos chega ben.
    Eu o outro día e tamén nun centro de saúde asistín a unha situación que non me puiden conter, e contesteille eu mesma á señora, a traballadora miroume coma decindo "non sabes canto cho agradezo", en fin o dito, paciencia.

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  5. Eu ben sei que estarás ata o moño do sonido, pero e que a min mólame moito o tono dese teléfono!!!

    (E que o meu fai gluglugluglú.... e xa me ten farto)

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  6. je je je que bueno... leerlo, que no vivirlo... en mis tiempos de teleoperadora en att. al cliente de distintas compañías me pasaron cosas similares... las típicas conversaciones de besugo... pero si... sobre todo el detalle de que el telef. corre. Es el típico que primero te cuenta su vida y cuando se decide a contarte o pedirte te mete prisas porque gasta tlef... Y la media hora que estuvo hablando él de sus cosas...?
    Yo no me desesperaba... mientras estos clientes hablaban aprovechaba para actualizar una base de datos... ordenar la mesa... total...

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  7. La historia la he escrito desdramatizando un poco la realidad, que supera con creces la ficción.. creedme. Un millón de historias se esconden tras las voces de esas personas que piden citas.. hay que dosificar mucho la indolencia..
    Cris, gracias por pasarte y comentar, te linkeo para verte con calma en otro momento.
    ¡Ojalá yo pudiese aprovechar para hacer otras cosas mientras se me enrollan por teléfono! pero, además de correr el teléfono, corre el tiempo, y se acumulan las llamadas, los descontentos, los malhumores y la gente de la cola del mostrador... por lo demás yo tengo muuuuuchaaaaa paciencia.. y cada día ejercito más mi indolencia.
    Ay, Chousiña.. jajajaja, ya sabía que te gustaba ese tono, por eso lo puse otra vez, pensando en tí.. jajaja, el muso de los tonos jejeje. Bueno, que sepas que es inventado, y sí, el real es odioso, suena parecido a un pavo cabreado.. y ni intento aproximar la onomatopeya, que me pongo con el tic y ya no paro en todo el día.. jajaja.

    Bicos para todos y bienvenidos a los nuevos. Gracias por venir.

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  8. jajaja, lo que tenemos que aguantar a veces. Yo algunos días pienso si nos estarán grabando para una cámara oculta....LA realidad supera a la ficción.

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  9. jajaja
    ¡Vaya paciencia hay que tener en ocasiones!
    Entre más nos pinchan, mas aguantamos ¿te das cuenta? jaja
    Me ha encantado leer esto, donde hasta te he visualizado a través del teléfono y con ese tic en el ojo. ¡Como para no tenerlo!
    Besos.

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