Hoy la oscuridad está hambrienta, se ha comido la clara luna llena, y nos da miedo, tan desconocida, pero sólo viene a liberarnos de la luz... ¿podremos vivir sin luz?.
Quizá lo que más me fascina de los agujeros (recurrente fascinación) sea la oscuridad. Oscuros agujeros que muestran la entrada de un camino a alguna parte, un tunel a otros mundos, desconocidos... Interrogante y hambrienta oscuridad. Venimos de la cálida oscuridad a través del canal del parto (el agujero más importante de nuestra vida), y somos expulsados hacia la fría luz. Así no es extraño que nos atraigan los agujeros negros, la más hambrienta oscuridad nos atrae hacia mundos desconocidos, viajes filosóficos a otros tiempos, a otras dimensiones... El gran viaje. No vayas hacia la luz, porque hoy... la oscuridad tiene hambre.
Existen agujeros oscuros y frios, y existen agujeros oscuros y calidos.
ResponderEliminarEn estos ultimos es donde solemos encontrar la paz....
Upss.... releyendome creo que en mis palabras pueden dar lugar a diversos sentidos...
Resumiendo.... creo que desde que venimos de las cavernas oscuras e iluminadas por hogueras, necesitamos de agujeros calidos y oscuros donde reposar nuestra mente.
Ademas... ¿quien te dice a ti que tras ese agujerito no se encuentra la puerta a otro mundo... a otra dimensión?.
Bicos.
¿hacia la luz no? la pobre caroline se va a quedar por siempre en la dimensión fantasmagórica!! :P
ResponderEliminarQue bonita imagen, anteanoche la luna en Madrid se veía así... a mi esto de los agujeros me produce una tremenda curiosidad... no me asustan... creo que entraría en la oscuridad.. además... mas hambre tengo yo que ella, je je que estoy a plan y no veas...
ResponderEliminarMe voy a poner un link a tu blog para verte mejor.... je je
Precioso COCO....
A mi la oscuridad me produce miedo, caminas hacia lo desconocido. La luz seguramente produce la falsa imagen de conocimiento, sin ser tal, pero aún así prefiero la luz.
ResponderEliminarMe gustó esta dicotomía filosófica. Un saludo.
Coido que nos puxemos filosóficos, si.De cando en vez toca.
ResponderEliminarPara dormir preciso a oscuridade máis absoluta (baixo as persianas sin que quede unha raioliña); pero recoñézome atraido pola luz cando estou desperto.
Bonita imaxe!
--->Se foses unha funcionata de finais do século XIX igual tiñas sorte e poñíante a traballar nunha ventaniña pequecha...a xeito de burato!!!<---
A moita luz, tamén fai non ver nada. Bicos
ResponderEliminarAs veces cando vives na escuridade, aparece unha pequena luz, debli, tenue, pero que che fai distinguir a lo menos un pouquiño o camiño, e eu vou a seguila
ResponderEliminarA mí la oscuridad me produce miedo, de noche tengo que dormír con una luz encendida...
ResponderEliminarDa miedo lo que puedo ver en la oscuridad...¿ tendré miedo a encontrarame comoigo misma?
Bicos
Gustoume moito,penso que a algún gústannos eses buratiños negros porque somos curiosos e eso é bó, non vamos quedarnos só có que vemos, hai que tratar de entrar nesa profundidade que...¡quén sabe o que agocha!.Bicos.
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