Y no existen: una recta no es más que una curva de radio infinito. Pero las vemos y se juntan, paralelas, perpendiculares, oblicuas y tangentes, y te quedas a cuadros, rayas que han decidido delimitar un espacio en tu cabeza, pero todo depende de la perspectiva. ¿Acaso el punto en el que se cruzan es único? Y sólo si están en el mismo plano. Geométricas ilusiones... Dos puntos no pueden ocupar el mismo espacio. No te ralles... la vida... es así.
Lo leí en un blog. A lo mejor es mentira. Pero es una bonita historia, sobre los ojos y las rayas:
Al parecer en un documental unos investigadores estudiaban el comportamiento de estos mamíferos marinos. Durante las sesiones de buceo los animalitos de aparente mirada distraída parecían dejarse estudiar mejor por algunas personas... Se preguntaron como distinguían a unos buzos de los otros, así que decidieron cambiarse los trajes de buceo para intentar engañarlos, pero no lo consiguieron, las rayas seguían dejando que se acercaran las mismas personas. Fueron haciendo más y más cambios intentando engañarlas. Sólo cuando se taparon los ojos consiguieron que las magníficas planeadoras del mar se confundiesen.
Yo les pondría la canción de los Golpes Bajos y me pregunto si la selección natural las perdonará por ser tan descuidadas en su confianza...
Y que siempre haya una canción que lo dice... No lo volveré a hacer más, no lo volveré a hacer más... y lo sientes mucho.. pero la vida es así, no la he inventado yo, la selección... natural y despiadada.