Siempre le habían gustado los espejos. Nunca le devolvían la misma imagen. Al principio buscaba la verdad, pero ahora sabía que la verdad no existe. Nunca lo ves todo. Nunca lo ves igual. Nunca, nunca ves el conjunto. Nunca te ves como eres. Sin embargo sí puedes ver trozos de verdad. A trozos, vemos a trozos, y no sólo la imagen que refleja el espejo. Todo lo que percibes viene sesgado, iluminado más o menos, pero incompleto. Enseguida cogemos los dibujos planos y huecos y los vamos rellenando de colores, de texturas, de volumen, y como reales se cuelan en nuestra cabeza, teniendo a veces más de nosotros mismos que de verdad ajena. Así, todo lo que vemos es un poco reflejo de nosotros mismos.... Y no todo se refleja igual todo el tiempo. Todo cambia, todo fluye, sí. Pero también, siempre permanece algo viejo, algo tuyo, algo que te identifica, que, aunque puedas parecer otra persona, te hace única e irrepetible...
A veces se asustaba de su imagen del espejo. Películas de terror habían hecho algunos estragos en su cabeza y, de este modo, cuando miraba, no podía evitar ver una especie de entrada a otro mundo. En ocasiones, se fijaba largamente en la imagen, esperando un renuncio, un algo que desenmascarara por fin a la impostora del otro lado. Pero la del otro lado sólo renunciaba a imitarla en sus movimientos cuando no le prestaba atención. De reojo le parecía que le hacía burla, y entonces la miraba de repente y se encontraba con su gesto absurdo.... idéntico, como ella pensaba que tendría que ser. Se acercaba y la examinaba más de cerca, muy seria.... hasta que se asustaba, porque le parecía ver el alma de la impostora, tan distinta a la de ella, cómo podría ser, que le susurraba desde allí, detrás de aquellos ojos escrutando, irradiando el sonido sordo de la verdad: Tú no quieres ver la verdad, tienes miedo, no estás preparada, es mejor que no me mires, que no me preguntes, que no me oigas..... Vete mientras puedas, huye, escapa, déjalo ya, cierra esta puerta, esta entrada, esta salida.... o no habrá marcha atrás....
Entonces sonreía, y otra impostora tomaba el control.... Y todo iba mejor. Aquella otra se parecía más a ella. Eso le gustaba pensar.
Cuando compraron la cabina de hidromasaje le gustó que tuviese un espejito de cortesía en uno de los laterales. Además, cada pared de la cabina era en si misma un espejo. Incluso a veces la divertía mirar su reflejo en los tiradores plateados de las puertas, que le devolvían imágenes deformadas, como en una feria, si se movía oportunamente se encontraba con cuatro tetas enormes...jaja. Era divertido...
¡Había jugado con su imagen en el espejo tantas veces!. Le hablaba, hacían bailes, cantaban... Ensayaban situaciones que luego, cuando ella no estaba allí, nunca resultaban igual.... Aisss, cuánto apoyo le ofreció aquella amiga durante su infancia. Cuánto tiempo pasaron juntas....
Poco a poco la fue dejando. Ya casi no hablaban. Casi ni la miraba. No encontraba tiempo para ella. Y así, la otra, la seria, la mala, la que le susurraba aquellas cosas con la mirada, era la que encontraba al otro lado del espejo....
Cuando se duchaba encontraba a ambas... Una en cada pared de la cabina. Se relajaba tanto que las dejaba a su libre albedrío. No las miraba demasiado para no agobiarlas, que se relajasen también..... Se turnaban las paredes.
Hoy la pared del espejo de cortesía era de la impostora mala. No se encontraba demasiado bien. Miró a su imagen amiga y le devolvió una mirada de lástima.... La otra, la de la miraba más dura y implacable, estaba como esperando el momento para atacarla... No se sintió demasiado inquieta.
Su imagen amiga intentó avisarla, pero no pudo hacer nada: como si de una despresurización se tratase, su alma se precipitaba por el espejo de cortesía.... y nada parecía poder parar ese proceso destructivo.....
Su cuerpo quedó inerte, sentado como una muñeca... empapado, medio vacío.... y sin embargo lastrado por la falta de voluntad, de energía....
Quedaba una esperanza, siempre queda una esperanza: la impostora amiga la sujetó fuertemente por el brazo pegado a su pared-espejo. La fuerza que tiraba en sentido contrario era muy fuerte. Sabía que si no conseguía sujetarla, lo poco que quedaba de ella se destruiría, se iría por aquella puerta abierta a los infiernos. Y ella iría detrás. No había sitio en ningún mundo para un reflejo huérfano.
¿Conseguirían vencer al mal?
No podrían hacerlo sin amor.
Había llegado la hora de saber la verdad: ¿era el amor una energía que no se crea ni se destruye, que sólo se transforma? ¿en qué se había transformado aquel amor? ¿es el odio lo que queda tras la transformación?
recuerdo, hace ya muchos años, enfrentarme a un espejo con un ácido en el cuerpo. me horrorizó lo que vi. prefiero estar seguro de quien soy, o al menos reconfortarme en la creencia de quien soy, en mi cotidianidad. los experimentos con gaseosa. las anoréxicas aborrecen su reflejo, pero están enfermas, y tú, con cuatro tetas, no puedes estar anoréxica!! el amor puede juntar todos los cristales rotos. seguro.
ResponderEliminarAquí estivo Zeltia, sin moito tempo -os invitados esperan- para desexarche moitas cousiñas lindas para tí, para os teus, neste ano, na vida enteira.
ResponderEliminarUn abrazo forte!
Os espellos tamén nos engañan ás veces. Unicamente cando os miramos cos ollos pechos din algo de verdade...(o cava de onte á noite aínda afumega dentro dos meus miolos!)
ResponderEliminarViña a desexarche unha feliz cabalgadura por este équido par que temos diante. Espero verte galopar e ir ó paso tamén.
Bicos bisestos!
Bicos e abrazos para todos!
ResponderEliminarOs meus mellores desexos para vos no futuro próximo e, como di Zeltia... para toda a vida.
Os espellos devolven anacos da realidade que nos temos que encargar de encaixar para entender o conxunto. Pero se sabemos mirar, nunca minten.
ResponderEliminarDesexo que teñas unha boa andaina por este 2012, chea amor transformado e renovado.
A que nos mira dende o espello, efectivamente pode ser unha alidada, un refuxio. Pero hai que ter tino coa outra... a implacable.
ResponderEliminarGustoume moito este post, pàreime a pensar, estiven un anaco dándolle de voltas... pero non cheguei a ningunha conclusión que vala para contar.
Moitas veces non nos gusta o que o espello reflicte, pero na nosa man está mudalo, pouco a pouco e con paciencia.
ResponderEliminarSaúde e sorte para este ano que comeza.
Feliz 2012.
Quedan oficialmente clausuradas las navidades.
ResponderEliminarBueno, espejos.
Me gustan los espejos. Ya tengo observado aquí que me interesa mi reflejo, mi verdad, vista desde dentro, y desde fuera. En este sentido, el blog es un espejo estupendo. Los reflejos siempre son distintos, y siempre reveladores.... aunque no siempre son fáciles de descifrar. No siempre conseguimos deducir algo válido, objetivo. Pero bueno, lo objetivo no tiene nada de interesante, aunque a veces sea importante acercarse a algo que no se mueva, un punto de referencia, una verdad verdadera. El caso es que si no se mueve no está vivo.... Así tenemos un mundo de infinitas velocidades, pero nunca, jamás existe algo que no se mueva en absoluto. Todo se va transformado, rota y se traslada, se convierte, lentamente o tan veloz que casi ni podemos verlo.... y es como si no existiera. Pero si pudimos pensarlo, fue... allí, en tu cabeza, en tu alma, en el sentimiento.... fue.
En fin.
Que no tengo tiempo para espejos.... Es cierto.
Así que me estuve planteando estos últimos tiempos dejar la vida on-line, dedicarme a la casa y los niños el poco tiempo que no estoy durmiendo o trabajando por cuenta ajena... Quizá también dedicarme a cultivar mi cuerpo y alma, hacer algo de ejercicio físico, leer... Jugar! Sí, también! Pasármelo un poco bien.
Quizá también estoy algo cansada del blog.... Lo que escribo, lo que veo en este espejo, no me satisface como lo hacía... Y la menudo me siento culpable dedicándome a estos menesteres en vez de hacer otras cosas de "más provecho"
Estamos a principios de año... Siempre me planteo estas cosas en esta época...
Voy a tomármelo con calma. Voy a aprender a organizarme. Y bueno, voy a dejar destapado este espejo, para quien quiera mirar... Yo principalmente, pues es mi espejo personal.... Ya veremos de qué tiempo dispongo y qué necesidades me acucian...
Feliz Año a todos los amigos que he hecho gracias a este espacio.
Besos y mi cariño para todos vosotros.
Pues estamos un poco igual Pitima, yo también he necesitado tomarme una distancia en la Web, jugar y divertirme de otro modo, crecer, cultivar cuerpo y alma y ¿quien sabe? quizá gestar nuevos, apasionantes proyectos, en red o fuera.
ResponderEliminarSuerte amiga, un abrazo.
Un abrazo muy grande, e tres bicos coma os que me deixaches.
ResponderEliminarEscribir aquí ten que ser un pasatempo, unha terapia, etc. moitísimas couss pode ser, pero nunca algo que non nos preste, polo que sexa.
Como todo se move, como ti dís, outras actividades veñen encher o noso tempo, e se un comenta e le moitos blogs é unha boa cantidade del invertido...
eu deixar o blog non mo plantexo, eu sempre escribo, onde sexa; quiz´`a poñelo privado...
ou o que pensei ´`as veces foi deixar de ler todos os blogs que teño enlazados, (é as veces máis), porque tamén sei que, cando un deixa de comentar nos outros blogs, pouco a pouco, coma quen se vai retirando ao campo a vivir, as visitas vanse espaciando, ata quedar un só.
Así volvería a ser un anónimo na rede.
De momento sigo contenta con ter o meu espacio, e gústame visitarvos.
saúde, recupérate, recolle forzas. tes unha tarefa tan linda...! (pero agotadora)
seguiremos en contacto, mentres ti queiras.
Tras el amor queda la indiferencia... Si hay odio... todavía queda esperanza...
ResponderEliminarquería poner: ¿todavía queda esperanza?
EliminarLa esperanza es lo último que se pierde...
EliminarYa hablaremos.. Ahora no tengo tiempo Pitima...
ResponderEliminartiempo, tiempo, tiempo... no lo tienes porque lo usas :-)
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